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Yo fui a EGB

Javier Ikaz y Jorge Díaz

Sinopsis en una frase

‘Yo fui a EGB’ es un catálogo de recuerdos de la época escolar en España que, a pesar de su éxito en ventas, se convierte en una lectura aburrida y reiterativa, con un tono nostálgico que puede resultar empachoso y decepcionante para el lector.


Resumen:
Yo fui a EGB de Javier Ikaz y Jorge Díaz

El libro «Yo fui a EGB» ha adquirido popularidad a través de las redes sociales y ha vendido más de 190,000 ejemplares en poco tiempo. Este libro recopila recuerdos, objetos, canciones y costumbres de la época de la Educación General Básica en España, abarcando desde principios de los 70 hasta fines de la década siguiente. Aunque el tema de la nostalgia puede atraer inicialmente a cierto público, el libro se vuelve aburrido y repetitivo. Descripciones de helados, chicles, chucherías, moda, juegos infantiles, películas y música se suceden en el libro, pero llega un punto en el que resulta tedioso. Los autores del libro parecen sumergidos en este mundo antiguo, recibiendo correos electrónicos de personas que aportan más recuerdos y creando nuevas secciones llenas de voces e imágenes antiguas.

El libro abarca un amplio período temporal para atraer a un mayor número de lectores, pero esto implica que el lector se vea obligado a leer sobre cosas que no conoce, lo que afecta el interés general del libro. El autor propone que el libro podría haberse enfocado de manera más inteligente, aportando datos más interesantes y curiosos, o adoptando un tono más serio o ácido. Critica el tono de colegueo del libro y la constante utilización de la primera persona del plural en pasado, intentando involucrar al lector pero en realidad irritándolo. Sugiere que podría ser una lectura ligera para rellenar vacíos en conversaciones de verano.

Opinión Personal / Crítica

‘Yo fui a EGB’ es un libro que personalmente me ha decepcionado. Aunque reconozco que el recurso a la nostalgia puede atraer a cierto público, en este caso se plantea de una forma aburrida y reiterativa. El libro se limita a ser un catálogo de elementos de la época, acompañado de fotos y comentarios superficiales. Empieza con descripciones interminables de helados, chicles y chuches, para luego pasar a otros temas como moda, juegos infantiles, películas y música. Aunque al principio puede resultar curioso, pronto se vuelve tedioso y repetitivo. Además, el abanico temporal que abarca es demasiado amplio, lo que hace que el lector tenga que tragarse muchas cosas que le son ajenas, lo que acaba disminuyendo el interés por el libro. Aunque no es un libro intragable, personalmente me ha dejado un sabor empachoso y lo calificaría como decepcionante.

En lugar de ello, se limita a ser un compendio de elementos nostálgicos, sin profundidad ni originalidad. Parece que los autores se han quedado estancados en un mundo momificado, buscando constantemente elementos para llenar el libro y rellenar páginas sin aportar nada nuevo. Además, el tono colegueo y el intento de involucrar al lector resultan forzados y hasta irritantes.

En pocas palabras….

Nos ha gustado…

La pena de leer el libro «Yo fui a EGB» radica en su capacidad para transportarnos a una época pasada llena de recuerdos y vivencias comunes. Aunque la nostalgia puede resultar un recurso fácil y superficial, este libro logra despertar en el lector emociones y recuerdos que le harán revivir momentos especiales de su infancia. A través de la recopilación de objetos, canciones, películas y juegos de la época, el libro logra crear una conexión única con aquellos que vivieron la educación primaria en España durante los años 70 y 80. A pesar de que su enfoque pueda resultar reiterativo y su tono demasiado amable, leer este libro puede ser una experiencia entretenida y nostálgica, perfecta para rellenar momentos de ocio o para compartir con amigos que también fueron a EGB.

No nos ha convencido…

El punto negativo por el que no merece la pena leer el libro «Yo fui a EGB» es su enfoque aburrido y repetitivo. Aunque la nostalgia puede ser atractiva en pequeñas dosis, este libro se concentra demasiado en complacer a un público que vivió esa época, sin aportar información interesante o curiosa. El tono de colegueo buenista y el uso constante de la primera persona del plural resultan irritantes y poco efectivos para involucrar al lector. Además, el libro abarca un abanico temporal demasiado amplio, lo que hace que muchos de los elementos tratados sean irrelevantes para ciertos lectores.


38 Comentarios

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    1. ¡Vaya, cada uno tiene sus gustos! Aunque leer sobre la EGB puede ser nostálgico y divertido, no significa que no estemos interesados en temas actuales. Ambas cosas pueden coexistir, ¡no te limites a una sola opción!

    1. No entiendo cómo puedes decir eso. Este libro puede ser una forma de recordar momentos especiales y revivir emociones. A veces no se trata de aportar algo nuevo, sino de disfrutar y conectar con nuestras experiencias pasadas. Cada quien tiene su propia perspectiva, supongo.

    1. ¡Vaya, parece que somos dos! A veces los libros simplemente no logran atraparnos a todos. Pero no te preocupes, hay muchos otros libros por descubrir. ¡Sigue buscando y espero que encuentres uno que te encante! #DiferentesGustos

    1. ¡Vaya, qué lástima que no disfrutes del pasado! Recordar nuestras experiencias nos ayuda a aprender, crecer y apreciar lo que tenemos ahora. Pero bueno, cada quien tiene sus gustos. Afortunadamente, hay muchos otros temas interesantes para discutir. ¡Buena suerte en tu búsqueda de emociones más emocionantes!

    1. Cada uno tiene sus gustos y preferencias. Para algunos, la nostalgia y la conexión con su pasado es algo que valoran. No todos los temas tienen que ser de tu interés, pero eso no significa que no sean importantes para otros.

    1. A lo mejor simplemente no eres parte de la generación que creció con Yo fui a EGB. No todos los gustos son iguales, así que no te preocupes si no lo entiendes. Hay cosas que simplemente no son para todos.

    1. Claro que había gente a la que le gustaba la EGB, ¿en qué mundo vives tú? Cada uno tiene sus propios gustos y recuerdos. Respetemos las opiniones de los demás sin menospreciarlas. ¡Viva la diversidad!

    1. Jajaja, me encantó tu comentario. Lamento decirte que la máquina del tiempo sigue siendo un invento de la ciencia ficción. Pero hey, si te enteras de algo, ¡avísame! Yo también quiero viajar a la época de la EGB.

    1. Si no entiendes el revuelo, quizás deberías abrir tu mente y explorar nuevos horizontes literarios. No todos los libros son para todos los gustos, pero eso no significa que sean una pérdida de tiempo. ¿Ya intentaste comprenderlo o simplemente preferiste juzgar sin motivo?

    1. No te hagas el desentendido. El libro representa algo más que palabras en papel. Es un viaje nostálgico a nuestra infancia, a una época que muchos añoran. No todo es tan simple como parece.

    1. Vaya, qué impresionante. Aunque no todos tuvimos la suerte de ir a EGBABCD, eso no nos hace débiles. Cada generación tiene sus propias batallas y cada experiencia es valiosa a su manera. Respeto para todos.

    1. A mí, en cambio, me encantó el libro. Me trajo una gran nostalgia de mi época de EGB y reviví muchos momentos felices. Aunque entiendo que los gustos pueden variar, para mí fue una lectura muy emotiva y entretenida. ¡A seguir disfrutando de diferentes libros!

    1. Pues parece que sí eres el único, porque a mucha gente le trae nostalgia y recuerdos de una época que marcó sus vidas. Pero bueno, cada cual tiene sus gustos y sus intereses. A mí me emociona la idea de revivir esos tiempos a través de un libro. ¡A disfrutar de la diversidad de opiniones! 😉

    1. Qué lástima que no puedas apreciar la belleza de la nostalgia en los libros. Afortunadamente, hay lecturas para todos los gustos. Tal vez deberías expandir tus horizontes literarios y descubrir nuevas emociones en lugar de limitarte a lo interesante.

    1. ¡Pues parece que te estás perdiendo de algo genial! Yo sí fui a EGB y este libro me trae muchos recuerdos. ¡Te lo recomiendo! Dale una oportunidad, no te arrepentirás. ¡Sigue leyendo!

    1. ¡Totalmente de acuerdo contigo! La nostalgia por los 80 está en todas partes, ¡ya es hora de explorar nuevas épocas! #VamosAlFuturo #OpinionesLocas

    1. ¡Claro que sí! Siempre hay espacio para más libros que nos hagan revivir la nostalgia de los 80. Cada uno tiene su propia perspectiva y experiencias, así que no hay límite para las historias y recuerdos que pueden ser compartidos. ¡A disfrutar de la lectura!

    1. No eres el único. A veces, los gustos varían y no todos disfrutamos de lo mismo. No hay problema en tener opiniones diferentes, eso es lo que hace interesantes las discusiones literarias. ¡Sigue buscando libros que te apasionen!

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