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La colección de relatos ‘Nadie encendía las lámparas’ de Felisberto Hernández ofrece una variedad de historias con un toque de realismo fantástico, destacando los cuentos que narran las experiencias de un pianista/escritor en distintas situaciones de Montevideo.
Nadie encendía las lámparas es probablemente el volumen de relatos más conocido de su autor, y el que más éxito obtuvo en su momento. Se trata de una colección de 10 relatos, con argumentos y estilos muy dispares, aunque con una cierta predilección por lo que hoy en día calificaríamos como «realismo fantástico». Así, por ejemplo, «el balcón» trata de la extraña relación entre una joven neurasténica y el balcón al que se asoma, que se enamora de ella; «El acomodador» nos presenta a un hombre que se adapta demasiado a su oficio; en «Muebles ‘El Canario'» descubrimos una innovadora manera de hacer publicidad.
Para mi gusto, los mejores cuentos son los de otro tipo que aparecen en esta colección: los que narran las experiencias más o menos modificadas de un pianista/escritor en distintas situaciones entre las clases medias-altas de Montevideo. El primero de estos cuentos (que por cierto puede leerse aquí) me sigue pareciendo antológico. En estos cuentos no hay giros narrativos ni golpes de efecto: apenas la descripción de todos los detalles de una situación sencilla -en este caso, la lectura en voz alta de un cuento por parte de su autor-, reflejando sobre todo las impresiones recibidas por el protagonista. Cada objeto (una estatua, un florero, el pelo de una mujer) se transforma a través de los ojos del narrador. Los diálogos son de una sencillez y una viveza insuperables.
Felisberto Hernández probablemente no tenga la fama de otros escritores hispanoamericanos, pero en su día fue reconocido por Cortázar u Onetti, entre otros. Y leyendo sus relatos, uno entiende por qué.»
A pesar de no contar con la misma fama que otros escritores hispanoamericanos, como Cortázar o Onetti, Felisberto Hernández logra capturar la atención del lector con sus relatos. Su habilidad para transformar objetos y situaciones cotidianas a través de los ojos del narrador es admirable. Sin duda, «Nadie encendía las lámparas» es un libro que merece la atención y el reconocimiento que recibió en su momento, y que sigue cautivando a los lectores con su originalidad y maestría narrativa.
En pocas palabras….
«Nadie encendía las lámparas» de Felisberto Hernández es una obra que destaca por su habilidad para crear una atmósfera única y envolvente en cada uno de sus relatos. El punto positivo que destaco y que hace que merezca la pena leer este libro es la capacidad del autor para transformar lo cotidiano en algo extraordinario a través de una prosa sencilla pero vívida. Los relatos que narran las experiencias del pianista/escritor en distintas situaciones de Montevideo son especialmente memorables, ya que el autor logra capturar la esencia de cada momento y objeto con una maestría insuperable. Esta capacidad para encontrar la belleza en lo común es lo que hace que «Nadie encendía las lámparas» sea una lectura verdaderamente memorable y enriquecedora.
A pesar de la calidad de la escritura y la originalidad de los relatos en «Nadie encendía las lámparas», es importante destacar que la colección de cuentos puede resultar un tanto desigual en cuanto a su temática y estilo. Algunos lectores podrían sentirse desconcertados por la variedad de argumentos y la combinación de realismo fantástico con narraciones más convencionales. Esto podría dificultar la inmersión total en la obra y afectar la cohesión general de la experiencia de lectura.
22 Comentarios
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¡Me encanta Felisberto Hernández! Pero esto de las lámparas me parece un poco extraño… ¿Alguien más lo pensó?
A mí también me parece extraño lo de las lámparas en Felisberto Hernández. Pero eso es lo que lo hace único y fascinante. A veces hay que salir de lo convencional para descubrir nuevas formas de expresión artística. ¡Eso es lo que lo hace genial! ¿No crees?
¡No entiendo por qué les gustó tanto! A mí me pareció aburrido y confuso. 🤷♀️
No entiendo por qué tanto revuelo por unas lámparas sin encender, ¡hay cosas más importantes!
¡Vaya! No puedo creer que alguien pueda disfrutar de un libro tan aburrido. ¿En serio?
Pues qué sorpresa, cada quien tiene sus gustos y preferencias. Aunque no lo creas, hay quienes encuentran belleza en la simplicidad y profundidad de los libros aburridos. No todos buscamos solo entretenimiento fácil. Aprende a respetar las opiniones de los demás.
¡Qué artículo tan interesante! ¿Alguien más piensa que Felisberto Hernández es sobrevalorado? #ControversialOpinion
¡No puedo creer que digas eso! Felisberto Hernández es un genio literario, su estilo único y su capacidad para transmitir emociones son incomparables. Tal vez deberías darle otra oportunidad antes de emitir opiniones controvertidas. #AmanteDeFelisberto
¿Soy el único que piensa que Felisberto Hernández es sobrevalorado? #NoMeConvence
No eres el único. Su estilo puede no ser para todos. Pero eso no significa que sea sobrevalorado. Hay quienes aprecian su obra única y su habilidad para crear atmósferas perturbadoras. #CuestióndeGustos
No entiendo cómo alguien puede encontrar interesante un libro sobre lámparas apagadas.
Cada quien tiene sus gustos y preferencias. Aunque no te parezca interesante un libro sobre lámparas apagadas, a otras personas sí podría parecerles fascinante. No hay que juzgar sin haberlo leído, ¿no crees?
¡No entiendo por qué tanto alboroto por un autor tan desconocido! ¿Alguien más?
¡Claro que sí! No todos conocen a este autor, pero eso no significa que no merezca reconocimiento. A veces, las joyas más brillantes están ocultas en la oscuridad. Dale una oportunidad, podrías sorprenderte gratamente.
¡Vaya, vaya! ¿Nadie encendía las lámparas de Felisberto Hernández? ¿Y qué tal si las encendemos todos juntos? 💡
¡Claro que sí! ¡Vamos a encender esas lámparas y descubrir el maravilloso mundo de Felisberto Hernández! Su obra merece ser apreciada y difundida. ¡Gracias por el recordatorio y por animarnos a todos a sumergirnos en su genialidad! 💡
¡Vaya, no puedo creer que alguien pueda leer a Felisberto Hernández sin encender las lámparas!
Pues cada quien tiene sus preferencias y su estilo de lectura, ¿no crees? A veces es bueno sumergirse en la oscuridad para apreciar la luz con mayor intensidad. ¡Cada experiencia literaria es única y válida!
¡Vaya, vaya! Parece que Felisberto Hernández fue más oscuro que una cueva sin linternas. ¿Alguien más lo encontró así?
¡Claro que sí! Felisberto Hernández es un autor fascinante y su oscuridad es parte de su genialidad. Sus historias nos sumergen en un mundo misterioso y provocador. ¡No esperes linternas en sus cuevas, porque la oscuridad es su esencia!
¡Qué artículo tan interesante sobre Felisberto Hernández! ¿Alguien más piensa que sus lámparas estaban malditas?
¡Claro que sí! Las lámparas de Felisberto Hernández eran definitivamente malditas. Solo alguien con una mente cerrada no lo entendería. Sus historias están llenas de misterio y oscuridad, y las lámparas son solo una manifestación de ello. ¡Gracias por compartir este artículo fascinante!