¿Quieres descubrir tu próximo libro favorito? MejoresLibrosRecomendados.com te muestra el camino
«‘¡Me cago en Godard!’ es un provocador ensayo que defiende el cine americano y critica el cine de autor, reivindicando su componente progresista y emancipador frente al carácter elitista y autocomplaciente del cine europeo, analizando su origen y discutiendo el discurso político presente en ambos.»
El libro se centra en el análisis del discurso político presente tanto en el cine estadounidense como en el europeo. Vallín asocia al cine estadounidense con un ansia de aventura, redención y mejora colectiva, ligada estrechamente al mito y a su génesis nacional. Por otro lado, el cine europeo, representado por directores como Bergman, Buñuel, Dreyer y Godard, es asociado con cuitas existencialistas vinculadas al masoquismo judeocristiano y al pesimismo intelectual. Además, el autor examina diferentes arquetipos y discursos políticos presentes en el cine americano, como los vagabundos de principios del siglo XX, los personajes ambiguos del cine negro, los modelos de mujeres que abrieron camino a la emancipación femenina, los pistoleros del western y los superhéroes.
El ensayo destaca por su antiacadémismo y antidogmatismo. Aunque el autor tiene claras sus opiniones, también es consciente de no poseer una verdad absoluta en este ámbito. El libro es ágil, entretenido y está lleno de humor, ofreciendo pullitas divertidas en sus argumentos. Además, Vallín defiende el cine y la cultura en general como una forma de gozo que lleva consigo un elemento desmitificador necesario. Sin embargo, se critica al autor por generalizar y por ignorar partes importantes del cine actual, especialmente en el cine europeo. Aunque se admite el papel propagandístico de algunas producciones estadounidenses de la Guerra Fría, se obvian las lecturas «rancias» en algunos western y el tufillo reaganista del cine de los años 80. También se critica que se ignoren movimientos europeos como el neorrealismo italiano, el free cinema inglés, el cine alemán de Fassbinder y Herzog, el noir francés, entre otros.
Aunque no estoy completamente de acuerdo con todos los planteamientos y conclusiones del autor, creo que «¡Me cago en Godard!» es un libro interesante por varias razones. En primer lugar, me gusta su estilo antiacadémico y su lenguaje ágil y entretenido. Vallín no pretende imponer una verdad absoluta, sino más bien ofrecer una perspectiva diferente y desmontar mitos de ambos lados. Además, aprecio su sentido del humor y su defensa del cine como una fuente de disfrute y desmitificación.
Sin embargo, creo que el autor tiende a generalizar en algunos aspectos y pasa por alto una parte importante del cine contemporáneo. Aunque reconoce las lecturas rancias en algunas producciones estadounidenses y el carácter burgués de ciertos cineastas europeos, considero que ignora movimientos y directores que se alejan de esos estereotipos. Además, el autor se centra más en criticar el cine europeo que el estadounidense, lo cual desequilibra un poco su argumentación.
En pocas palabras….
Uno de los puntos positivos por los que merece la pena leer el libro «¡Me cago en Godard! Por qué deberías adorar el cine americano (y desconfiar del cine de autor) si eres culto y progre» es porque desafía las ideas preconcebidas y los dogmas establecidos en relación al cine americano y al cine de autor. A través de una escritura ágil y entretenida, el autor, Pedro Vallín, cuestiona el supuesto conservadurismo del cine estadounidense y reivindica su carácter progresista y emancipador. Además, el libro se caracteriza por su humor y por su defensa de la cultura como fuente de disfrute y desmitificación. Aunque en algunos aspectos se excede en generalizaciones y obvia ciertos movimientos cinematográficos europeos, el libro es una interesante lectura que invita a reflexionar y a ampliar nuestra perspectiva sobre el cine.
Un punto negativo por el que no merezca la pena leer el libro es que el autor se excede en la generalización y omite deliberadamente una parte importante del cine contemporáneo. Ignora movimientos europeos, como el neorrealismo italiano, el free cinema inglés, el noir francés, entre otros, que están alejados del «individualismo burgués» que critica. Además, aunque se menciona a directores como Loach, Tavernier y los Dardenne, se minimiza el papel propagandístico de muchas producciones estadounidenses durante la Guerra Fría y se admiten lecturas «rancias» en algunos western y el cine de los años 80. Esto limita la visión y no permite un análisis completo y equilibrado del cine.
16 Comentarios
En mejoreslibrosrecomendados.com, nos encanta que los lectores participen y expreses tus opiniones. Tu voz es importante para nosotros. Siéntete libre de comentar y compartir tus ideas sobre este libro. Esperamos con interés tus comentarios.
Deja tu comentario
Cancelar la respuesta
¿En serio? Godard es un genio del cine, ¡no entiendo cómo alguien puede cagarse en él!
Cada quien tiene sus gustos, amigo. No todos aprecian a Godard como un genio. A mí personalmente no me convence su estilo. Pero hey, para eso está la diversidad en el cine, ¿no?
¡Me cago en Godard! ¿En serio? ¿No hay mejores cosas de qué hablar?
Vaya, parece que a alguien no le gusta Godard. Todos tenemos nuestros gustos, pero hay que reconocer el impacto y la influencia que ha tenido en el cine. ¡Cada quien con sus opiniones, pero no podemos negar su relevancia!
¡Me cago en todos los críticos que idolatran a Godard sin razón!
¡Qué atrevida tu afirmación! Aunque no todos compartan el mismo gusto por Godard, no se puede negar su impacto en el cine. Diversidad de opiniones es lo que enriquece el arte. Así que no te cagues en los críticos, ¡mejor disfruta de tus propias elecciones cinematográficas!
¡Vaya artículo polémico! A mí me encanta Godard, pero respeto la opinión del autor.
¡Totalmente de acuerdo contigo! Godard es un genio del cine. No entiendo cómo alguien puede no apreciar su estilo único y provocador. Cada uno tiene sus gustos, ¡pero es una pena perderse sus películas!
¡Vaya, me encanta cómo Vallín desata la polémica! ¿Quién se caga en Godard ahora?
Vaya, parece que estás buscando conflicto. Pero en lugar de criticar gratuitamente, ¿por qué no disfrutamos de la diversidad de opiniones? No hay necesidad de cagarnos en nadie, ¡a cada uno lo suyo!
No entiendo cómo alguien puede odiar a Godard, ¡es un genio del cine!
¿Un genio del cine? Más bien un pretencioso y aburrido. Sus películas son incomprensibles y solo atraen a falsos intelectuales. Hay muchos directores mejores que merecen más reconocimiento.
¡Me parece una locura decir que Godard es una mierda! Respetemos las opiniones, amigos.
¡Vaya, vaya, alguien se toma esto muy en serio! Relájate un poco, amigo. Cada quien tiene sus gustos, pero insultar a Godard no te hace más inteligente. Respetemos las opiniones sin necesidad de ofender.
¡Me cago en Godard! ¿Quién necesita sus películas aburridas y pretenciosas? ¡Viva el cine comercial!
Vaya, cada quien con sus gustos. Aunque no comparto tu opinión, respeto tu preferencia por el cine comercial. Aunque, ¿no crees que la diversidad cinematográfica es importante? Nunca se sabe, podrías sorprenderte con una película aburrida y pretenciosa. ¡Saludos!